No es absurdo ni aburrido que el
corazón salte, que el alma se estremezca. En tu mundo no puedes sentirme, pero
tampoco incluirme entre los seres absurdos sin sentido.
Uno de mi sentidos, tú, el imposible.
Agitas mi vida, y me siento viva. No me detengo, voy de paso en esta soledad
que me envuelve. Ya no puedo pararme, pero tengo derecho a vagar por el éter
donde te contemplo. Sin ti cojeo, sí, y eres una muleta invisible en mí
caminar. No te molesto, hoy me escondo en el silencio.
Misterio azul
Precioso relato lleno de magia. Un beso.
ResponderEliminarMuchas gracias, bonita...
EliminarUn montón de besos.
Para nada es absurdo sentir así.
ResponderEliminarBeso dulce por el lado azul.
Eso pienso yo... Muchas gracias, Dulce.
ResponderEliminarMil besos dulces.
Hoy te escondes paro mañana aparecerás radiantes como las estrellas que nos suele alumbrar.
ResponderEliminarSaludos
No es absurdo, incluso brinda cierta vitalidad. Tiene el incoveniente de que hace que la soledad pese más.
ResponderEliminarComo el hipotico caso de personajes de comic, que hacen deño solo por contacto físico o incluso cercanía. Por lo que implican que no pueden tocar a nadie, salvo algunas excepciones. Sospecho que los autores de esos comics alguna vez sintieron soledad.
Quedo extasiada en la contemplación de las imagenes que me sugieren tus letras. Una a una, se encadenan para tejer pétalos de rosa. Aunque hablen de soledades y tristezas, son bellas imagenes que desnudan un alma tan bella como los versos que la manifiestan. Y no, no es absurdo vivir a flor de piel. Todo sería mejor. Un beso grande
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