Desconfío de la palabra y me sumerjo en el mundo misterioso de las aguas oscuras, donde todo flota sin forma.
No me atrevo a desenvolver nada, todos los envoltorios son hechos de papeles rotos. No quiero encontrar sorpresas que no me hagan feliz.
Dejo que mi cuerpo flote, y con el mi alma. Me dejo llevar por las aguas oscuras sin pretender nada, sin desear nada, solo flotar…
Misterio azul
Autor imagen: lilya Corneli
Aunque sea por este período, has eliminado los deseos, o se han eliminado solos, es lo mismo. Sin deseos la paz está cerca.
ResponderEliminarUn beso grande
No eres tú sola la que desconfía de la palabra,somos muchos los frustrados que no hacemos caso a esas palabras que dicen sin sentirlas ,solo para quedar bien de cara a la galería.
ResponderEliminarsaludos
No se puede flotar permanentemente, en algún momento tenemos que coger el toro por los cuernos.
ResponderEliminarSaludos
A veces he sentido que no quiero nada, ni sentir, ni pensar ¡nada! Y lo has reflejado muy bien en ese no querer desenvolver ni encontrar nada nuevo, distinto o que nos pueda sorprender negativamente. Cuando una se siente así, lo cierto es que desearía flotar simplemente sin abrir siquiera los ojos.
ResponderEliminarBesos!
Qué belleza¡
ResponderEliminarUn beso.
No te preocupes, la luz acudirá a ti, Estoy segura.
Eres luz. Un beso.
Flotar hasta encontrar alguna orilla.
ResponderEliminarDulce beso.